JOSÉ LUIS APPLEYARD, Paraguay
LA CASA
Una casa es
un hombro derrotado,
es una mano
abierta sin simiente,
una argamasa
inútil, un doliente
conjunto de
ladrillos apagado,
un
pensamiento absorto en el pasado
que agrieta
con sus voces el presente,
es un oscuro
trozo de poniente,
es un
juguete antiguo y olvidado.
Una casa es
un llanto, un dolorido
balcón sin
mariposas anhelantes,
una casa es
mudez y es alarido,
es un amor
que ha muerto sin amantes.
Una casa,
Señor, es una infancia
huyente y
malherida de distancia.
Comentarios
Publicar un comentario